El nuevo presidente de Colombia, Gustavo Petro, nombró como embajador en Nicaragua a León Fredy Muñoz, un excongresista que desde 2018 tiene abierta una investigación en su contra por supuesto tráfico de drogas. Tras el nombramiento, en redes sociales se le ha señalado de “narcotraficante”, entre otros adjetivos, sin que hasta ahora haya un veredicto sobre el supuesto delito.

Todo empezó el 31 de mayo de 2018, un mes antes de que Muñoz asumiera como congresista. Ese día fue detenido en el Aeropuerto Internacional José María Córdova de Rionegro, en Antioquia, proveniente del Aeropuerto Internacional El Dorado, en Bogotá. Los oficiales dijeron que le habían encontrado 160 gramos de cocaína en su equipaje de mano. Fue acusado por supuesto tráfico y porte de estupefacientes.

Desde el primer momento el funcionario colombiano se declaró inocente y su defensa afirmó que su maleta había sido manipulada por otras personas. El partido político del que es miembro, Alianza Verde, tras los sucesos dijo en un comunicado que Muñoz “siempre ha sido un líder honesto, transparente y comprometido con su comunidad”. Además pidió que se le garantizara su seguridad, ya que había recibido amenazas e incluso dos atentados contra su vida. 

Lo más reciente en el caso fue que la Corte Suprema de Justicia accedió, en mayo de este año, a recibir como pruebas las llamadas, ubicaciones y mensajes de texto de Muñoz en el primer semestre de 2018, algo que el funcionario había solicitado hace meses ya que, según su defensa, estas pruebas demuestran que no cometió el supuesto delito.